Formas de aprendizaje en los niños

Formas de aprendizaje en los niños

Los niños aprenden de todo lo que tienen en su entorno, de las personas, cosas y situaciones, pero siempre será necesario la presencia de un adulto, que sea capaz de mediar, trasladar y traducir cada estimulo al niño.

El rol del adulto es ser el facilitador del niño para que este comprenda su entorno, existen evidencias que muestran los impactos del desarrollo infantil de interacciones positivas y receptivas con los adultos.

Cuando los maestros manejan conductas de manera intencional, atienden los intereses de los niños y canalizan su atención de forma receptiva, esto produce un cambio de comportamiento en el aula y el rendimiento académico.

Los hermanitos, los juguetes y otros niños en la escuela son necesarios para contribuir con el aprendizaje, el cual es potenciado con el adulto cuidador, la presencia de este último da seguridad al niño y aumenta su autoestima.

Técnicas del adulto para potenciar el aprendizaje del niño

Atender las señales y seguir intereses: No solo se trata de ofrecer cariño y afecto, el adulto puede responder e identificar las diferentes maneras de comunicación del niño, por ejemplo: Nombra el objeto de su interés, responder si el niño sonríe o balbucea, explicarlo lo que sucede, entre otros.

Introducir nuevos conceptos: Nombrar todo lo que esté en su entorno, por ejemplo: durante el baño, explicarle cuando el agua esta fría o caliente, seco o mojado, partes del cuerpo señalarlas y mencionarlas. Durante la comida explicar los tamaños, texturas, formas y colores de los alimentos.

Expandir el conocimiento del niño: En este caso se refiere a cuando leen o miran cuentos juntos, por ejemplo: si el niño imita el sonido de un animal que ve en el libro decirle como se llama y describirlo.

Jugar: Este es considerado primordial durante el proceso de aprendizaje, es muy divertido, ya que el adulto participa y potencia el juego de roles, recuerda que los niños imitan todo lo que los adultos hacen.

Introducir retos y problemas que el niño debe resolver, como jugar a abrir un tarro y sacar lo que está en su interior, armar un rompecabezas, encontrar un objeto escondido.

El adulto tiene la capacidad de variar los juegos, planteando retos más complejos, pero alcanzables para el niño, si son muy fáciles el niño lo resolverá pronto y perderá el interés, si este es muy complejo se puede frustrar y no continúa.

Reconocer y reforzar los intentos y logros de manera positiva: Es necesario felicitar al niño con aplausos, besos, expresar sus logros e intentos, para reforzar su autoestima y animarlo para que siga aprendiendo.

Beneficios de la interacción de los adultos

Todas estas actividades ayudan al niño de muchas formas:

Desarrollan su lenguaje: Exponiendo y familiarizando con nuevas palabras que no conoce, comprendiendo, interiorizando y que introducirá poco a poco es su vocabulario.

Promoviendo sus capacidades cognitivas y motrices: El niño es capaz de familiarizar con conceptos como causa y efecto o la permanencia de objetos.

Fomentando su creatividad y desarrollo socio-emocional: Esto promueve el apego, el vínculo afectuoso entre niño y adulto, formando una relación cálida y afectuosa entre ambos.

Provocando su curiosidad: La falta de tiempo, el cansancio, la presencia de otros niños, responsabilidades limitan la cantidad y calidad de interacción entre el niño y el adulto sobre todo si este es cerrajero, ya que su trabajo le exige mucho tiempo.